El Trastorno del Juego como Trastorno Adictivo y Psicofarmacoterapia Creativa
Adicción no significa solamente "adicción a sustancias". En el centro de la definición de dependencia de sustancias está la pérdida de control. La adicción al juego pertenece a las adicciones sin sustancias/no químicas o adicciones conductuales/conductuales. El concepto de adicciones conductuales es nuevo y revolucionario en psiquiatría. La adicción al juego, anteriormente el juego patológico o problemático, se produce por la pérdida de control sobre el juego. Cada vez hay más evidencia que sugiere que las adicciones conductuales se asemejan a las adicciones a sustancias en muchos dominios, incluida la fenomenología, la tolerancia, la comorbilidad, la contribución genética superpuesta, los mecanismos neurobiológicos y la respuesta al tratamiento. La adicción conductual ha sido propuesta como una nueva clase en la Quinta Revisión del Manual Estadístico de Diagnóstico (DSM-5), pero la única categoría incluida es la adicción al juego. La prevalencia de los trastornos del juego en la adolescencia es muy elevada y para determinados trastornos (especialmente los relacionados con el uso de Internet) se acentúa con el tiempo. En este documento, presentamos una descripción general completa de los trastornos del juego desde la definición, la epidemiología, las manifestaciones, las comorbilidades, la evaluación, las opciones de tratamiento y las formas de tratamiento existentes. Dada la complejidad del abordaje del tratamiento de los jugadores, se hace necesario un abordaje creativo integrador individualizado, que es la base de la psicofarmacoterapia creativa. Debido a la posibilidad de aparición de problemas con el juego y otros déficits de control de impulsos, debemos tener mucho cuidado al iniciar un paciente en terapia de reemplazo de dopamina o terapia con aripiprazol.
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